¿Qué emociones nos ha despertado la Navidad?

Lunes 23 de Diciembre, 2024 -

Por: Jhon Jairo Prado

¿Qué emociones nos ha despertado la Navidad?

Emociones y sentimientos de la Navidad

 

Ilusión

La ilusión es la palabra que mejor define la cara de los niños cuando ven una imagen de Papá Noël, abren un regalo que les han traído los Reyes o pasean con sus abuelos por las calles iluminadas con los colores de la Navidad. Los niños son capaces de contagiar esa ilusión a todos los adultos que los rodean.

 
 
 

Añoranza

Los niños desprenden ilusión, pero también, verlos nos hace añorar aquellos años en los que disfrutábamos como ellos. Seguramente, a lo largo de las Navidades hayamos recordado escenas de nuestra infancia que nos encantaría poder revivir. Es muy posible que algunas de las escenas tuvieran por protagonistas personas que ya no están con nosotros. Personas que, si bien no olvidamos, en Navidad las recordamos aún más.

 

Amor

Donde hay añoranza seguramente algún día hubo amor. Las personas que más añoramos son aquellas que más han significado en nuestras vidas y a quienes hemos querido.

 

Tristeza

El duelo por la pérdida de lo amado nos trae la tristeza. Tristeza por ver que el tiempo pasa, que la vida es limitada, que ha pasado otro año más o que no volveremos a ver a tal persona. Un año termina y empieza otro nuevo.

 

Esperanza

Para muchos adultos, esta es la luz que más brilla en la Navidad: esperanza por emprender y lograr algún proyecto, personal o profesional. Esperanza por mejorar la salud. La esperanza es ilusión, y la ilusión nos hace sentir vivos y que cada día tenga su propio sentido.

 

Culpa

Las celebraciones navideñas nos llevan a cometer excesos. Comemos más de lo que necesitamos, bebemos alcohol, trasnochamos y gastamos mucho dinero. La culpa por estos excesos y, quizás, por no haber logrado nuestros objetivos a lo largo del año, puede haceros reflexionar y modificar nuestra consciencia de manera que nos ayude a establecer nuevos propósitos para el nuevo año.

 

Felicidad

Felicitamos las Navidades porque esperamos que estas estén llenas de alegría y felicidad. Reencontrarnos con un hermano que vive fuera o juntarse con los amigos del colegio es, sin duda, motivo de alegría. La Navidad no sería tal sin felicidad.

 

Vergüenza

Habrá muchas personas que se pregunten dónde cabe la vergüenza en un periodo de fiestas. Hay personas que por su situación económica no puedan hacer regalos y, por ello, puedan sentir vergüenza, por ejemplo. Se puede sentir vergüenza al volver a ver a personas de las que hace tiempo no sabes nada, o al reencontrarte con personas a las que no has prestado mucha atención el resto del año.

Comentarios

0 registros encontrados

Opiniones de los Usuarios

Deja un Comentario